Verdad o Ficción.
La verdad no necesita demostrarse a sí misma: existe, creamos en ella o no. Las mentiras sólo existen si las creamos nosotros y sólo sobreviven si creemos en ellas. Las mentiras no son más que una distorsión de la palabra, una distorsión del significado de un mensaje, y esa distorsión se halla en el reflejo, en la mente humana. Las mentiras no son reales -son una creación nuestra-, pero les otorgamos una vida y las hacemos reales en la realidad virtual de nuestra mente.
Como artistas estamos siempre distorsionando la verdad con símbolos, pero ése no es el problema. Como hemos dicho antes, el problema surge cuando nos creemos esa distorsión, porque algunas mentiras son inocentes y otras son letales. Vamos a ver de qué modo podemos utilizar la palabra para crear una historia, una superstición, sobre una silla. ¿Qué sabemos sobre una silla? Podemos decir que una silla está hecha de madera o de metal o de tela, pero solamente estamos utilizando símbolos para expresar un punto de vista. La verdad es que realmente no sabemos qué es ese objeto. Pero podemos utilizar la palabra con toda nuestra autoridad para transmitirnos un mensaje a nosotros mismos y a todos los que nos rodean: “Esta silla es fea. Odio esta silla”.
El mensaje ya está distorsionado, pero esto es sólo el principio. Podemos decir: “Es una silla estúpida y creo que quienquiera que se siente en ella se puede convertir también en un estúpido. Creo que tenemos que destruir la silla porque si alguien se sienta en ella y se rompe, la persona se caerá y se fracturará la cadera. ¡Oh, sí, esta silla es maligna! Elaboremos una ley contra la silla para que todo el mundo sepa que representa un peligro para la sociedad. De ahora en adelante ¡está prohibido acercarse a la silla maligna!”.
Si transmitimos este mensaje, quienquiera que lo reciba y esté de acuerdo con él empezará a tenerle miedo a la silla maligna. Muy pronto, habrá personas que le tengan tanto miedo a la silla que empezarán a tener pesadillas relacionadas con ella. Llegarán a obsesionarse con la silla maligna y, por supuesto, tendrán que destruirla antes de que la silla las destruya a ellas.
¿Ves lo que podemos hacer con la palabra? La silla es sólo un objeto. Existe y ésa es la verdad. Pero la historia que creamos sobre la silla no es la verdad; es una superstición. Es un mensaje distorsionado y el mensaje es la mentira. Si no nos creemos la mentira, no hay ningún problema. Pero si nos creemos la mentira e intentamos imponérsela a otras personas, la situación puede desembocar en lo que denominamos el mal.
Por supuesto que lo que denominamos el mal tiene muchos niveles dependiendo de nuestro poder personal. Algunas personas son capaces de conducir al mundo entero a una gran guerra en la que mueran millones de personas. Existen tiranos en todo el mundo que invaden otros países y destruyen a su población porque los tiranos creen en mentiras.
Ahora podemos entender fácilmente por qué existe un conflicto en la mente humana y sólo en la mente humana -la realidad virtual-, porque no existe en el resto de la naturaleza. Hay billones de seres humanos que distorsionan todos esos símbolos en sus cabezas y entregan mensajes distorsionados. Eso es lo que realmente le ocurrió a la humanidad. Esto explica el motivo por el cual el sueño que denominamos infierno existe en el mundo de los seres humanos. El infierno no es más que un sueño lleno de mentiras.
Recuerda, nuestro sueño está controlado por lo que creemos y lo que creemos podría ser verdad o podría ser ficción. La verdad nos conduce a nuestra propia autenticidad, a la felicidad. Las mentiras nos conducen a las limitaciones en nuestra vida, al sufrimiento y al drama.
Los seres humanos creamos las mentiras y después las mentiras nos controlan a nosotros. Pero, tarde o temprano, llega la verdad y las mentiras no pueden sobrevivir ante la presencia de la verdad.
Quienquiera que crea en la verdad, vive en el cielo.
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por don Miguel Ruiz Jr.
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One Response
Jose Fabian Lopera Garcia
toda mi vida la he encaminado a mi fascinación hacia los astros, siento que conozco parte del universo y veo señales en los cielos que indican que mis preguntas son oidas