Para poder entender el momento actual que estamos viviendo es importante recordar lo que los Maestros nos han estado anunciando desde que el Maestro D.K. nos hablara de la exteriorización de la Jerarquía espiritual para este tiempo; la aparición en el plano físico, del Quinto Reino de la Tierra.
La Jerarquía pertenece al Quinto Reino. Sus Leyes y Principios están basados en el amor. Muchas de nuestras más preciadas formas de vivir están en contradicción con las leyes que rigen ese reino.
Por lo tanto, es de suponer que, si el Quinto Reino se está acercando y tiene un poder vibratorio mucho mayor que el Cuarto que somos nosotros, la humanidad, va a ocasionar una serie de transformaciones y todo aquello que no responde a su nota vibratoria entrará en crisis y en un cierto proceso de disolución.
Siento que debemos tener claro la dirección del Plan de Dios, aunque no lo podamos comprender en su totalidad, pero es imperativo que nos demos cuenta de la dirección hacia dónde va, no sea que por vivir irreflexivamente estemos apoyando los falsos valores que tienen que desaparecer y, en consecuencia, fortalezcamos las fuerzas contrarias que trabajan sin descanso para que el Plan de Dios, que siempre es el Bien, no se cumpla.
La influencia de los Señores de la Liberación, que son fuerzas cósmicas que penetran a nuestro mundo a través Shamballa (el centro planetario en donde se conoce la Voluntad de Dios), están ocasionando profundas transformaciones en todos los niveles de la vida planetaria. El Maestro D.K. señala en su libro “Los Rayos y las Iniciaciones” que la intensidad del pensamiento centralizado del Señor del Mundo ha alcanzado un punto de tensión justo previo a los estupendos cambios que se producirán en la expresión de Su vida, nuestro planeta.
Este tiempo es de exteriorización de la vida interna y aunque hoy parezca que la Tierra se está convirtiendo en un infierno, lo que sucede es que se están derrumbando los sistemas que pertenecen al viejo orden que tiene que desaparecer y como dice la profecía… no va a quedar piedra sobre piedra… de este sistema con el que administramos nuestra vida, porque no responde al momento cósmico que nos ha tocado vivir.
El cielo se está acercando y nosasusta porque nuestra vida está regida por valores contrarios a los del cielo, y tendrán que desaparecer.
En la Lemuria, el hombre animal fue fecundado por la mente y aparecimos nosotros, la humanidad. Para que aparezca el Quinto Reino, el ser humano será fecundado por el Amor en un potente acercamiento del alma a la personalidad.
Este acercamiento tiene su mayor obstáculo en el mundo de espejismos en el que vivimos que ha formado como una gruesa costra que no permite la unión de los dos mundos. Hay que horadarlo para que la clara luz del alma pueda expresarse libremente. Esta costra tiene tres capas, una en el plano mental formado por las ideas erróneas y egoístas, otra en el emocional formado por el deseo incontrolado y los falsos valores, y otra en el etérico formado por el aferramiento a la sustancia que da como resultado el materialismo.
Un espejismo está sustentado por el otro, de tal manera que desde la mente sepuede disipar el espejismo del plano etérico y del plano emocional, pero el espejismo de la mente sólo lo despeja la luz del alma.
Poco a poco, debido al acercamiento del alma, la humanidad está despertando y ha comenzado a reconocer su propia falta de libertad. Nos estamos dando cuenta de que vivimos en un mundo en el que una MATRIX, determina lo que vamos a pensar, hacer, desear. El mundo está gobernado por un puñado de seres humanos que, a través de la industria de la comunicación, deciden nuestra conducta.
No sólo qué pensamos, sino qué comemos, cómo nos vestimos, quién es bueno, quién es malo… No hay una sola esfera de nuestra vida que no esté regida por esta matriz que sabe cómo hacer para que parezca que pensamos cuando lo que hacemos es repetir pensamientos sembrados en la psiquis humana. Pero nos estamos dando cuenta…
Reconoce, en el caos de nuestros días, este acercamiento, reconócelo en las propias crisis de tu vida. El alma se acerca y con su toque, cual príncipe encantado va despertando a la bella durmiente (la humanidad) de su sueño milenario.
No te aferres a lo que ya no tiene que estar, mira la luz aparecer en el horizonte de tu vida. Es la luz del alma que devela quién eres en verdad. Permite que esa luz inunde tu conciencia y transforme tu vida.
Nada ni nadie puede detener el designio de Shamballa.
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Carmen Santiago.
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Compartiendo comprensiones
Hermanos y hermanas, todos hijos del mismo Padre e integrantes de ese Centro del Planeta que llamamos Humanidad. Estamos en horas cruciales donde la Humanidad como un todo, y cada uno de nosotros, tiene un importante rol a jugar.
Son tiempos de crisis, son tiempos de violencia, son tiempos de guerra, pero también son tiempos de misericordia, de bondad, de pronunciarnos por la paz.
En primer lugar, no hablemos de paz si nuestro corazón está lleno de ira, de odios, de desprecio hacia los que piensan, sienten o creen diferente que nosotros. Si esto ocurre dentro de ti, aquiétate y sabe Yo Soy Dios en cada uno de nosotros, no importa detrás de cual apariencia.
Reconoce en el humano a tu hermano, y siente compasión infinita por los que aun creen que la guerra, la violencia y la venganza disfrazada de justicia, son las que van a arreglar, corregir o mejorar el mundo.
Martin Luther King lo dijo mejor que nadie: “Aprendemos a vivir juntos como hermanos o moriremos todos juntos como idiotas”. Reflexionemos y llenemos de voluntad de dialogo, de comprensión, de compasión nuestro corazón y vivamos de esa forma no importa donde el Alma nos haya colocado en esta vida.
Escuché que hay una campaña que pide que cada vez que bebas agua digas en vos alta o mentalmente: “Yo estoy en Paz y el Mundo también”. Creemos pensamientos formas para saturar con buenos pensamientos la atmósfera del planeta.
De nada vale quejarnos ni enojarnos, solo sumamos violencia a la guerra. Respira y deja que el santo y sagrado aliento que alienta en todo lo que existe en el universo, recuerde a todo lo que respira que este planeta es nuestra casa, el lugar del universo que se nos ha dado para vivir y que la queremos llena de alegría, paz y buena voluntad.
Que el Señor de la Eterna Primavera nos haga renacer más lucidos, más buenos, más llenos de luz con cada respiración. Inhala Luz, retiene Luz y exhala la paz que a toda comprensión trasciende, esa que hizo escribir en la Desiderata “te resulte evidente o no el mundo marcha como debiera”.
Marta Paillet.
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